El poder del talento humano

En las últimas décadas se ha producido un cambio significativo en la forma en que las empresas piensan y gestionan a sus empleados. En el pasado, la mayoría de las empresas veían a sus equipos como simples recursos para llevar a cabo tareas y alcanzar objetivos, sin prestar mucha atención a sus necesidades o expectativas.

En la actualidad, es indiscutible que las personas que forman las compañías son uno de sus activos más valiosos. Como demuestra la Encuesta Global de Bienestar 2022-2023 de Aon*, las empresas cada vez priorizan más el bienestar de sus empleados, consiguiendo incrementar los resultados entre un 11% y un 55%.

Si a esto le sumas que el talento de los empleados de una empresa influye directamente en su capacidad para innovar, competir y/o adaptarse a los cambios, ya tenemos la respuesta que buscábamos.

Algunos cambios que han generado esta mayor importancia del factor humano en las empresas se pueden resumir en la evolución hacia una economía del conocimiento que hace dispararse la competencia por el talento.

Podríamos especificar estos cambios en 3 tendencias o causas:

1. 1. La evolución hacia una economía basada en el conocimiento: A medida que la economía ha evolucionado hacia una mayor dependencia del conocimiento y la innovación, las empresas se han dado cuenta de que el talento y las habilidades de sus empleados son críticos para mantenerse competitivos en el mercado.Las empresas que priorizan la formación y el desarrollo de sus empleados, y que fomentan la creatividad y el pensamiento innovador, pueden aprovechar al máximo las oportunidades en la economía basada en el conocimiento y mantenerse competitivas en un mercado global en constante evolución.

1. 1. Cambios generacionales: Las nuevas generaciones de trabajadores, especialmente los Millennials y la Generación Z, valoran cada vez más la cultura de la empresa, la diversidad, la inclusión y el propósito más allá del salario. Estos valores hacen que las empresas se vean obligadas a impulsar un cambio en la gestión de sus empleados, creando ambientes laborales que satisfagan estas expectativas, y que permitan a los empleados desarrollarse personal y profesionalmente.Las organizaciones que no pueden satisfacer estas expectativas pueden enfrentarse a grandes dificultades para atraer y retener el talento. Como resultado, muchas empresas están empezando a adoptar una cultura de trabajo más flexible, ofreciendo horarios de trabajo más ajustables y opciones de trabajo remoto, además de crear programas de desarrollo profesional para atraer y retener a los empleados más jóvenes.

1. 1. Mayor competencia por el talento: En un mundo cada vez más globalizado, la competencia por el talento es cada vez más intensa. Las empresas que estén dispuestas a ofrecer más que un salario competitivo conseguirán atraer y retener el talento, con lo cual conseguirán ser más competitivas.

En resumen, para atraer y retener a los empleados las empresas están creando ambientes laborales más inclusivos, flexibles y con propósito, que permitan a los empleados desarrollarse y prosperar.

«La evolución hacia una economía del conocimiento hace dispararse la competencia por el talento»

¿Son las políticas de gestión de personas reales, o puro marketing?

La tendencia actual en cualquier estrategia de marketing, y más en concreto de employer branding, es la autenticidad y transparencia, pues los clientes valoran cada vez más la veracidad de las marcas.

Por lo tanto, el compromiso de las empresas con sus equipos no puede ser una estrategia de branding vacía, sino que debe corresponderse con la realidad. Además, como nos recuerda el proverbio popular, ‘las mentiras tienen las patas muy cortas’ y no llegan muy lejos, los resultados o pérdidas derivadas de una gestión de personas falsa pueden ser peores que no hacer nada.

Las empresas que muestran su verdadero propósito y compromiso con su audiencia tienen más posibilidades de ganar la confianza y la lealtad de sus clientes. De ahí la importancia de adoptar medidas reales y de valor para sus empleados, como oportunidades de desarrollo profesional y personal, con el fin de fidelizar a sus empleados, aumentar la productividad y mejorar la calidad de sus productos y servicios.

¿Qué resultados están obteniendo las empresas que realmente defienden esta filosofía?

Las empresas que aplican políticas centradas en las personas y que las sitúan en un lugar preferente están obteniendo consecuencias favorables como:

• Mayor compromiso y fidelización de los empleados: Cuando los empleados se sienten valorados y perciben oportunidades reales de desarrollo, se reduce la rotación de personal y con ello los costes asociados como la selección o el reclutamiento y la capacitación.

• Mejora del clima laboral y la productividad: Cuando las empresas promueven ambientes laborales saludables, inclusivos, equitativos y diversos, mejoran también la motivación de sus empleados, lo que se traduce en una mayor productividad y calidad de productos y servicios.

• Mejora de la reputación de la empresa: Cuando se adoptan políticas centradas en las personas, estas experimentan un mayor sentimiento de pertenencia y orgullo. Sentimiento que transmiten a su entorno, haciendo a la empresa más atractiva tanto para clientes como para nuevos talentos.

• Aumento de la innovación y la creatividad: cuando se valoran y fomentan la creatividad y la innovación las empresas mejoran la calidad de sus productos y servicios, y fomentan la exploración de nuevas oportunidades de negocio.

¿Las políticas de gestión del talento ayudan a incrementar las ventas de la compañía?

El aumento de ventas no es necesariamente resultado directo de las políticas centradas en las personas, ya que hay muchos factores que pueden influir en el aumento de las ventas de una empresa, como la competencia, el mercado y la economía en general. Sin embargo, las políticas centradas en las personas ayudan a mejorar la imagen de la empresa y la calidad de sus productos y servicios, lo que puede llevar a un aumento de las ventas a largo plazo.

Por ejemplo, si una empresa tiene una reputación positiva debido a su cultura laboral, es posible que los clientes se sientan más atraídos por sus productos o servicios en comparación con los de una empresa con una reputación negativa.

Además, si la empresa tiene empleados motivados y comprometidos, es más probable que ofrezcan un servicio al cliente excepcional, lo que puede llevar a la fidelización de los clientes existentes y a atraer a nuevos clientes.

En conclusión, aunque las políticas centradas en las personas no garantizan directamente un aumento en las ventas, contribuyen a mejorar la reputación de la empresa, a aumentar la calidad de sus productos y servicios, y a ganar competitividad en el mercado; lo que a largo plazo puede llevar a la fidelización de los clientes existentes y al aumento de las ventas.

«las políticas centradas en las personas ayudan a mejorar la imagen de la empresa y la calidad de sus productos y servicios»

Actualmente muchos departamentos de personas forman parte del Comité de Dirección debido a su responsabilidad estratégica.

En una empresa donde las personas son el centro, los RRHH tienen un papel fundamental a la hora de garantizar que la organización cuente con el talento adecuado para llevar a cabo su misión, y alcanzar sus objetivos. Para ello, es esencial que trabajen en estrecha colaboración con los líderes de la empresa para entender las necesidades de la organización, en términos de recursos humanos, y desarrollar estrategias para atraer y retener al personal adecuado.

Además, los departamentos responsables de personas también tienen la responsabilidad de fomentar una cultura laboral que promueva el bienestar, la inclusión y la diversidad. Esto incluye la creación de políticas y prácticas de trabajo que fomenten el equilibrio entre la vida laboral y personal, así como la igualdad de oportunidades para todos los empleados.

En resumen, los profesionales de RRHH hoy en día tienen un papel fundamental en asegurar que las empresas pongan a las personas en el centro de sus decisiones y estrategias. Al hacerlo, pueden ayudar a crear una cultura laboral positiva y colaborativa que fomente la retención del talento y el éxito a largo plazo de la organización.

* AON. Encuesta Global de Bienestar 2022-2023